El tema central de este Blog es LA FILOSOFÍA DE LA CABAÑA y/o EL REGRESO A LA NATURALEZA o sobre la construcción de un "paradiso perduto" y encontrar un lugar en él. La experiencia de la quietud silenciosa en la contemplación y la conexión entre el corazón y la tierra. La cabaña como objeto y método de pensamiento. Una cabaña para aprender a vivir de nuevo, y como ejemplo de que otras maneras de vivir son posibles sobre la tierra.

martes, 29 de octubre de 2019

Le Cabanon de Le Corbusier


Le Cabanon. El mítico refugio de 16 m2. que Le Corbusier diseñó como su paraíso

Crédito: Olivier Martin Gambier


Uno, dos, tres, cuatro: cuatro pasos, a lo sumo cinco. Esa es toda la distancia que se puede recorrer dentro de Le Cabanon, considerada un monumento de la modernidad y, sin embargo, parte del capítulo menos difundido de la carrera de Le Corbusier: el conjunto de construcciones que el arquitecto suizo realizó en Roquebrune-Cap-Martin, el lugar que eligió para su retiro en la Costa Azul francesa.

Fue el 30 de diciembre de 1951, día del cumpleaños de su mujer, que, sentado a la mesa de un barcito de la zona, se puso a dibujar los planos. "Estoy tan satisfecho con mi cabaña que seguramente decida morir aquí", le dijo a un amigo, el fotógrafo húngaro Brassaï, en agosto del año siguiente, cuando estuvo terminada.

Aplicando su teoría sobre las medidas del hombre, el "Modulor", y la relación con su espacio vital, Le Corbusier construyó para sí esta cabaña modesta solo en apariencia: muy pronto se convertiría en un ícono de la arquitectura moderna


Crédito: Olivier Martin Gambier

Lo esencial se hace visible: un lavatorio separado de una de las dos camas por un armario, una mesa y dos cajones como asientos. Con su ojo de artista, el maestro hizo ventanas mínimas para enmarcar elementos específicos del paisaje como en un cuadro vivo. 

De a poco se fueron haciendo más frecuentes sus temporadas en ese paraíso propio, muy cerca de una playa de canto rodado a la que llegaba bajando entre las rocas varias veces al día. Una tarde soleada de 1965 lo sorprendió un ataque al corazón, tal como lo había predicho, junto al agua cristalina del Mediterráneo. Hoy, a pesar del tiempo, el retiro del genio sigue siendo una obra innovadora, con sus refinados 16m2 diseñados para poner a prueba el espacio mínimo indispensable con un enfoque ergonómico y funcional, y sin jamás dejar de lado la belleza.


Crédito: Olivier Martin Gambier


Impresionan la calidad del espacio interior y los climas que generan el uso magistral de los materiales, la luz que enciende el piso pintado de amarillo y la trama en el cielo raso en franca referencia a Mondrian y Kandinsky, dos precursores del arte abstracto.

Imagen de archivo de la Fundación Le Corbusier.

Bocetos de Le Cabanon, el refugio de Le Corbusier con sus refinados 16m2. Cuarenta y cinco minutos le llevó a uno de los arquitectos más influyentes del siglo XX plasmar en papel las coordenadas definitivas de su utopía personal.

En esta estructura con revestimiento de troncos diseñada al milímetro, el hombre es la medida de todas las cosas: tiene 3,66x3,66m y la altura de una persona promedio con el brazo levantado, 2,66m, dimensiones surgidas de su propio invento: el "Modulor".

Sol, espacio y árboles: los he reconocido como materiales fundamentales del urbanismo, portadores de las alegrías esenciales Le Corbusier. "Cuando las catedrales eran blancas"

Después, el mito. Y una cabañita de madera que seguirá en pie como justo homenaje a quien se atrevió a soñar una arquitectura que pudiera unir a todos y cada uno de los hombres con la naturaleza.

Crédito: Olivier Martin Gambier


Ni cocina, ni ducha. Le Corbusier contaba con los servicios de L'Étoile de Mer, el restaurante de su amigo Thomas Rebutato. Y con la inmensidad del mar.





El último refugio para un artista




El último refugio para un artista



Situado en un lugar aislado y rodeado por una imponente naturaleza, esta residencia en Noruega es el sueño de cualquiera


SOFÍA SOLÁNS / FOTOS: PASIAALTO


El cielo y el mar como inspiración.

El músico y compositor de jazz noruego Håvard Lund tenía un sueño por cumplir que se había convertido en casi una obsesión: crear la residencia de artistas más bella del mundo. La primera vez que pisó la isla de Fleinvær, al norte de Noruega, supo que aquel emplazamiento sería el escogido para hacer realidad sus anhelos.


El lugar está totalmente aislado del tumulto urbano.

El lugar debía servir para que músicos, artistas y cualquier alma creativa pudieran pasar temporadas de inmersión artística. Allí podrían alquilar habitaciones, ensayar y compartir experiencias, rodeados por un impresionante paisaje aislado de la vida urbana y envuelto por el gélido mar.


El proyecto de TYIN y Rintala Eggertsson Architects estuvo completamente abierto a la participación.

Lund se asoció con los arquitectos del estudio TYIN, que dado la dificultad del proyecto al que se enfrentaban decidieron contar también con la ayuda de Rintala Eggertsson Architects, igual o más innovadores que ellos; sumaron su experiencia trabajando en proyectos con condiciones climáticas adversas. Entre todos decidieron que el proyecto estaría absolutamente abierto a la participación y contaron con especialistas y artistas que intervinieron en cada fase.


Se respetaron al máximo la fauna y flora del lugar.

Las delicadas condiciones del lugar hicieron obligatorio un exhaustivo estudio del sitio que se realizó junto a los estudiantes de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología. Para que la interferencia con el terreno fuera lo menor posible se decidió dividir el proyecto en varias construcciones aisladas. La vegetación existente se respetó al máximo como principio, pues cualquier modificación implicaba años para volver a crecer en esa atmósfera. Además está un punto estratégico de anidación de gaviotas, por lo que resultaba relevante que las intervenciones no afectaran a la actividad de los animales.


Una sauna sobre un muelle recibe a los visitantes en el refugio soñado por el músico y compositor de jazz noruego Håvard Lund.

El proyecto comprende una serie de volúmenes que descienden la colina hacia el mar. A los visitantes que llegan en barco les recibe una sauna sobre el muelle. Una antigua sala de espera de los muelles se ha reformado para alojar a los huéspedes durante la noche. También hay cuatro pequeñas unidades para dormir que se reparten en la ladera de la colina, una sala de conciertos y la cantina.


Sala de inmersión situada en lo alto de la colina.

En la cima de la colina se diseño una interpretación contemporánea del almacén tradicional del pueblo sami: el njalla, levantada sobre el tronco de un árbol. El edificio mira al espectacular paisaje por encima del resto, está pensado como un lugar para la reflexión y la inmersión.


En los revestimientos de este refugio de Håvard Lund se emplearon materiales reciclados.

Las fachadas se han revestido con materiales reutilizados de otras construcciones, además de por las ventajas que ofrece el reciclaje, esta condición es casi imperativa en el proyecto pues por logística resulta complicado llevar materiales hasta el lugar del terreno.

Håvard Lund.jpg

Håvard Lund (nacido el 20 de octubre de 1970 en Gildeskål , Noruega ), es un músico de jazz noruego ( clarinete y saxofón) y compositor, conocido por una serie de grabaciones y colaboraciones con músicos como Anja Garbarek , Vigleik Storaas , Steinar Raknes , Håkon Mjåset Johansen , Farmers Market , Frode Fjellheims Jazzjoik Ensemble, que luego se convertiría en Transjoik , Trygve Seim Ensemble y Trondheim Jazz Orchestra . [1] [2]